En septiembre de 1979 la Asamblea General de la Organización Mundial del Turismo decidió instituir el día mundial del turismo a partir del 27 de septiembre de 1980. Hoy día se calcula que el sector turístico representa el 10 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial y que emplea directa o indirectamente al 10 por ciento de los trabajadores del planeta; factores como el aumento de la clase media y el abaratamiento del transporte, por ejemplo, han contribuido poderosamente al crecimiento de la empresa turística.
Como cualquier otra actividad, el turismo tiene un indiscutible efecto sobre la economía de los países, la interacción social y el medio ambiente; de ahí que este año las celebraciones de este día que se dan en la Ciudad de Doha, Estado de Qatar se centren en el turismo sostenible como una herramienta para el desarrollo.
El ser humano es curioso y explorador por naturaleza y nuestro mundo está lleno de maravillas, tesoros invaluables a nuestros sentidos que ameritan ese ahorro porcentual del salario, ese premio personal al esfuerzo y ese sentido de vivir una vida llena de memorias para contar.
Viaja, disfruta y respeta son los consejos prácticos para el viajero responsable que resaltan las Naciones Unidas a través de la Organización Mundial del Turismo (OMT). Ya sea internamente o saliendo de nuestro país, viajar siempre aporta a la sostenibilidad de nuestra sociedad, a construir un mejor futuro y a la vez a convertirnos en los mejores embajadores de este, parafraseando al Secretario General de la OMT, Taleb Rifai, en su discurso de apertura de las celebraciones del día mundial del turismo en Doha este año.
Para los viajeros, no hay mejor momento para conocer el mundo que el presente, al final, es lo único que realmente se tiene, aquellos que argumentan que el mundo ya no es un lugar seguro o que la recesión económica imposibilita la oportunidad de invertir en ello son los que se auto confinan a una jaula de dudas, miedos la mayoría de las veces excesivos por inexistentes.
Para los países, no hay mejor momento que este para reconocer las bondades del turismo e invertir en una empresa nacional que rinde para el crecimiento de la patria y de sus ciudadanos, para el desarrollo social y cultural que representa la mejor comprensión entre los pueblos del mundo y todo el valor agregado que esto conlleva.
Me siento orgulloso al ver cuánto ha crecido Panamá en esta industria turística y de saber que nuestro gobierno bajo la administración del Presidente Juan Carlos Varela haya destinado un mayor presupuesto de inversión en este tema, así como otros programas conexos, la enseñanza del idioma inglés, la renovación de Colón, los trabajos de rescate y mantenimiento de nuestro patrimonio antiguo, el cuidado de nuestras playas entre muchas otras cosas, son iniciativas que tenemos que aplaudir pues son apuestas al futuro, a la proyección de Panamá y de nuestro pueblo, de nuestra cultura y de nuestra existencia en este mundo, el gigantesco hogar que nos alberga a todos independientemente de nuestras divergencias.